Dra. Estrella Flores-Carretero.
¿Eres de las personas que pueden aprender de los errores?, Todos cometemos errores, errar es parte inherente del ser humano. Sin embargo, hoy en día no se aceptan fácilmente, sino que se suelen penalizar sin tener en cuenta la importancia del proceso de aprendizaje.
Como dijo el profesor en Ciencias Sociales Jean-Pierre Astolfi: “solo dejan de equivocarse los que no hacen nada”. Esto implica que para seguir avanzando hacia el futuro con éxito resulta esencial asumir riesgos sin dejar de lado las enseñanzas.
En este sentido, es esencial no identificarse con el error, poder comprender cómo los fallos no tienen que ver con lo que eres, sino con tus actos, los cuales siempre pueden mejorar.
En este artículo, exploraremos el concepto de aprender de los errores y proporcionaremos consejos prácticos sobre cómo convertirlos en verdaderas oportunidades de éxito.
6 acciones que puedes utilizar para aprender de los errores y ser una persona más exitosa
¿Qué son los errores?
Los errores son una parte natural de la vida que puede darse en cualquier ámbito, desde el personal hasta el profesional. Estos se definen como una decisión que produce un resultado indeseado.
Mucha gente piensa que son radicalmente negativos y que deben evitarse a toda costa, pero en realidad suponen una valiosa oportunidad de crecimiento, porque es un hecho que de los errores se aprende.
Para sacar el máximo provecho, es crucial modificar tu perspectiva, hacer un seguimiento del progreso y tener esperanzas realistas. De este modo, los errores pueden transformarse en peldaños hacia el éxito, en lugar de barreras que te impiden avanzar.
¿Por qué es difícil reconocer los errores?
Proteger la imagen que se tiene de uno mismo provoca sentimientos de fragilidad y demasiada exposición. En otras palabras, la razón principal es que tememos las repercusiones de cometer errores.
Además, puede que ni siquiera se sea consciente de la equivocación. Al estar tan concentrado en las ambiciones y planes personales es corriente no percibir el panorama general ni el efecto de los propios actos.
Los sentimientos también pueden interferir a la hora de reconocer y por ende aprender de los errores. Ante una época de estrés es complicado ser capaz de ver las cosas con objetividad.
Por último, los componentes culturales también pueden ser un factor que explique por qué es difícil reconocer los errores. Vivimos en una sociedad que con frecuencia valora más la impecabilidad de los logros que la vulnerabilidad y el desarrollo personal.
Todo ello interfiere a la hora de querer aprender del error y pedir ayuda cuando es necesario. Por tanto, es imperante saber desafiar estas creencias sociales y ver las equivocaciones como oportunidades de aprendizaje, además de una herramienta para alcanzar la madurez profesional y personal.
¿Qué ocurre si no aprendes a reconocer los errores que te ocurren?
No identificar los pasos en falso puede tener repercusiones importantes, conduciéndote a un patrón de comportamiento propenso al error altamente perjudicial para el crecimiento personal y profesional.
Además, la receptividad a la crítica constructiva de una persona que no reconoce sus errores se ve afectada. Al fin y al cabo, avanzar junto a estas meteduras de pata es clave para una vida satisfactoria y gratificante.
Es un hecho que, si no aprendemos de los errores, pierdes oportunidades de mejorar. Cometer continuamente los mismos fallos, resulta bastante desmoralizador e improductivo.
Además, puedes tener dificultades para establecer relaciones significativas con los demás, debido a que para ocultar los errores será necesario emplear acciones que pueden perjudicar a las personas de tu entorno.
Por eso la falta de honestidad y la autenticidad al mostrarte incapaz de aprender de los errores supone un gran obstáculo para construir estas conexiones duraderas.
¿Qué es aprender de los errores?
Evaluar las decisiones y sus resultados es una parte fundamental del desarrollo personal. Ser sincero contigo mismo, así como reconocer tus imperfecciones es esencial en este proceso.
Aprender de los errores puede ser un proceso complicado, ya que a menudo se las situaciones están disfrazadas, como un factor de suerte o de elementos externos, que influyen en los resultados de cada situación.
Además requiere de un proceso de autoconocimiento para que seas capaz de reconocer tus fortalezas y debilidades, con la finalidad de desarrollar la madurez suficiente para aprender reconocerlos, por eso este paso es indispensable para poder mejorar.
Aprender de los errores no consiste simplemente en evitar otros similares en el futuro, sino en utilizarlos como una verdadera oportunidad de crecimiento y desarrollo personal. Para ello debes analizar los acontecimientos y las razones que propiciaron un resultado indeseable y evaluar las consecuencias que se generaron.
De esta forma puedes aprovechar las lecciones que la vida te ofrece, adquieres una mayor resistencia y preparación para afrontar cualquier reto futuro, ya que aprender esta aptitud refuerza la autoconfianza.
Además, si te tomas el tiempo necesario para aprender del error y sus resultados, es sencillo comenzar a identificar patrones para saber con detalle dónde reside el inconveniente y desarrollaras las herramientas necesarias para afrontar en el futuro una situación igual o similar.
Existen múltiples ejemplos de aprender de los errores en el día a día, pero aquí te dejo el siguiente caso sencillo: Un camionero que recibe una multa por exceso de velocidad aprende de su equivocación a raíz de conducir imprudentemente y comienza a hacerlo dentro de los márgenes establecidos.
¿Cuál es la importancia de aprender de los errores?
Comprender plenamente la importancia de aprender de los errores es clave para desarrollar la madurez y ganar experiencia en la vida, además de poder establecer relaciones más estables y duraderas con las demás personas.
Dedicar tiempo a reflexionar sobre tus errores te proporciona una comprensión inestimable de la propia conducta y procesos de pensamiento, ayudándote a tomar decisiones más informadas y acertadas en el futuro.
Además, extraer conocimientos de los errores es una forma esencial de cultivar la determinación. Cuando sobreviene la adversidad, es sencillo desanimarse o rendirse por completo. Sin embargo, reconceptualizando tus errores como oportunidades de progreso, fomentas ante todo una actitud más proactiva.
Esto puede mantener tu empuje y concentración, incluso en momentos de dificultad. Así que toma cuenta del papel primordial que desempeña aprender de los errores en la formación de una habilidad tan crucial como es la resiliencia y la experiencia.
Por último, aprender de los errores es una forma estupenda de adquirir una mayor inteligencia emocional. Al reflexionar sobre tus experiencias, puedes lograr una comprensión profunda de tus propias capacidades, defectos e instigadores.
6 acciones que puedes hacer para aprender de los errores
He aquí las seis medidas esenciales para poder aprender del error y convertirte en una persona de éxito:
Aplica la autocrítica con moderación
Es vital reconocer los defectos, ya que muchas veces son los que generan ciertos errores. Pero debes tener cuidado para no ser demasiado duro contigo. Una crítica demasiado severa puede provocar un miedo insoportable al fracaso, que te impida asumir riesgos y avanzar.
En este sentido, lograr un equilibrio entre la autocrítica y la autocompasión es una de las mejores claves que te permitirá aprender de los errores. Para comprenderlos mejor es determinante concentrarse en sus desencadenantes en lugar de castigarse o creerse inútil.
Es importante señalar que aplicar la autocrítica con moderación no significa despreciar los errores ni restarles importancia. Por el contrario, debes de ser imparcial, sin dejar que tus emociones se interpongan en el juicio adoptando una actitud equilibrada.
Evita actuar impulsivamente
¿Cómo corregir errores? Para tener éxito, hay que aprender a controlar los impulsos. Las decisiones precipitadas pueden conducir a resultados adversos, por lo que es importante tomarse un respiro y sopesar las opciones antes de escoger un camino.
Practicar técnicas de relajación, como la respiración profunda o la meditación, contribuye a mantener la cordura para tomar decisiones más razonadas. Mejorar el autoconocimiento también te permite reconocer cuándo te sientes impulsivo y frenar tus tendencias en esos momentos.
La impulsividad puede atribuirse a menudo a la falta de confianza o al temor al fracaso. Por ello cultivar tu autoestima y mantener una actitud positiva previene este tipo de comportamiento.
Establecer objetivos concretos y concentrarte en los pasos que debes seguir para conseguirlos también ayuda a mantener la disciplina, así como a abstenerte de acciones precipitadas que impidan tu progreso a la hora de aprender de los errores. Recuerda, la determinación unida a la inteligencia emocional son las claves para hacer realidad tus ambiciones.
Aprende a perdonar y a perdonarte
Enmendar las cosas es imprescindible, así es como se aprende de los errores. Las personas exitosas reconocen que los fallos forman parte de la experiencia educativa, y no dejan que estos deslices las caractericen.
Al concederte la absolución, posibilitas el progreso a partir de cometer errores en el trabajo o en cualquier otro campo vital, en lugar de rumiarlos y que obstruyan tu desarrollo.
Comprender el significado del perdón y aplicarlo a los demás es tan fundamental como perdonarte a ti mismo. Aferrarse a los rencores o a la mala voluntad siempre supone una carga de cara a aprender de los errores.
En cambio, los exitosos comprenden el poder del perdón y lo utilizan en su beneficio. Al perdonar te liberas de las vibraciones adversas para comenzar a abrirte hacia nuevas oportunidades o experiencias.
Perdonar no consiste sólo en renunciar a las heridas del pasado, sino también en mostrar simpatía hacia los demás. Al hacerlo, te conviertes en un individuo más compasivo y próspero.
Es necesario recordar que el perdón no es un hecho aislado, sino un procedimiento. Por tanto, requiere tiempo y esfuerzo perdonarse de verdad, pero los beneficios merecen la pena.
Así pues, no olvides que aprender a perdonar consiste en construir progresivamente un futuro mejor para ti y tus seres queridos a medida que asimilas los fallos cometidos.
Adopta un pensamiento flexible
Esto implica permanecer abierto a distintos puntos de vista e interpretaciones de una situación, entrenar la escucha abierta, para adquirir la voluntad de modificar tus perspectivas cuando sea necesario.
Cuando posees una actitud flexible, puedes reaccionar más fácilmente ante nuevos obstáculos. Lo cual te salva de quedarte atrapado en pensamientos pesimistas o invasivos y permite aprender de los errores.
Una forma estupenda de desarrollar el pensamiento flexible es ejercitar la atención plena. Esto significa prestar mucha atención a tus sentimientos e ideas sin juzgarlos, para estar abierto a lo que se presente en el momento.
Al ser más consciente de tu propia actividad mental, puedes reconocer patrones contraproducentes, y crear enfoques más adaptables para abordar las dificultades. Otro aspecto integral de la integración del pensamiento flexible es estar preparado para cuestionar tus propias nociones preconcebidas, es decir, tus prejuicios.
Cuestionando tus suposiciones, puedes lograr una comprensión más profunda de ti mismo, así como de tu entorno y evitar quedarte estancado en formas de pensar rígidas o doctrinarias.
Pero, para seguir creciendo y aprender de los errores, debes estar dispuesto a aceptar nuevas oportunidades, fuera de la zona de confort. Al hacerlo, puedes seguir perfeccionando tus aptitudes con el propósito de avanzar hacia tus aspiraciones.
Trabaja tu inteligencia emocional
Quienes tienen una inteligencia emocional elevada son hábiles para gestionar sus propios sentimientos, así como para interpretar los ajenos. Una buena forma de perfeccionarla es llevar un diario de emociones. En este, anota tus pensamientos a lo largo del día para reflexionar sobre ellos más tarde, con perspectiva.
Otro aspecto significativo de la inteligencia emocional es ser capaz de restar importancia al origen de la decepción. Cuando tienes un contratiempo es sencillo caer en la negatividad y sentimientos de inadecuación en vez de aprender de los errores.
Sin embargo, quienes tienen una buena gestión emocional comprenden que su valía no está vinculada a sus logros, y que los fracasos forman parte del procedimiento de aprendizaje.
Al ignorar la fuente de la decepción mientras te concentras en las lecciones aprendidas, puedes fomentar una mayor resiliencia y confianza en ti mismo. Buscar apoyo también es esencial cuando trabajas la inteligencia emocional.
Esto podría implicar encontrar un terapeuta o un entrenador que te ayude a desarrollar habilidades específicas, o simplemente conversar con un amigo sobre tus experiencias. Recuerda que la inteligencia emocional es un viaje, y no pasa nada por cometer errores durante el camino.
Por tanto, la inteligencia emocional es una habilidad invaluable que te permite navegar por la vida con confianza, resiliencia y una mayor capacidad para conectar con los demás mientras puedes aprender de los errores.
Céntrate en el presente
En un mundo en constante cambio, es fácil sentirse abrumado por el pasado y el futuro, lo cual dificulta aprender de los errores. Sin embargo, la clave para convertirte en una persona de más éxito reside en centrarte en el momento presente.
Al intentarlo, puedes evaluar objetivamente lo que ha ido mal y dar los pasos necesarios para superarte. Cuando te concentras en el aquí y ahora, adquieres la capacidad de tomar decisiones más sabias, lo cual es especialmente pertinente de cara al futuro éxito.
Practicando la meditación de atención plena, entrenas a tu mente para que evite desviarse a través de errores pasados o preocupaciones futuras. Otro medio por el que centrarte en el presente es fijarte objetivos medibles. Al fijar objetivos, es crucial ser realista sobre lo que quieres conseguir. Formando una red de apoyo consistente y sumergiéndote en influencias alentadoras, también puedes mantenerte decidido hacia tus metas.
Recomendaciones sobre cómo los 6 consejos para aprender de los errores y ser una persona más exitosa
En definitiva, aprender de los errores es una de las lecciones más valiosas por adquirir como seres humanos. No son el fin del camino, sino el comienzo de uno nuevo hacia el éxito.
Seguro que habrás escuchado que debes evitar que los errores te definan y esto es porque, en cambio, debes utilizarlos como una fuente de motivación para seguir adelante y alcanzar cualquier meta en un proceso continuo, pero igualmente enriquecedor.
De esta forma, como indica el psicólogo educativo Mario de Jesús González en su artículo “El error como herramienta de enseñanza y aprendizaje” : “Se puede hacer del error una nueva manera de acceder al conocimiento”
Esta máxima debe aplicarse a cualquier ámbito más alla del educativo, especialmente el profesional, ya que el temor a equivocarse limita al crecimiento personal en cualquier edad porque al fin y al cabo todos cometemos errores.
Como te comentaba anteriormente, buscar apoyo profesional resulta una estrategia excelente para encaminarte hacia este aprendizaje. En esta línea el IEIE ha creado la formación ideal con La Academia de Emociones la Experiencia.
Es un curso intensivo de cinco días con un grupo de expertos, mientras viajas, conoces gente nueva y realizas actividades para mejorar la gestión de los errores en una ciudad tan emblemática como Jerez de la Frontera.
Mejorarás habilidades tan esenciales para el bienestar como son la autoestima, el autocontrol, la resolución asertiva de conflictos o la toma de decisiones gracias a técnicas concretas. ¿A qué esperas para venir a La Academia de las Emociones?