Dra. Estrella Flores-Carretero.

¿Percibes que el rendimiento y el bienestar mental de tu plantilla han descendido últimamente? Una de las causas más probables es el estrés laboral por la pandemia.

En tiempos de incertidumbre, encontrar formas eficaces de combatir este desasosiego es más importante que nunca. Las consecuencias de una pandemia se han sumado a un entorno laboral de por sí exigente.

Se estima que los costes del estrés laboral son de millones de dólares cada año, incluyendo gastos médicos, bajas o pérdida de productividad. Por eso, entre otras razones, cada vez más organizaciones están enfocando su cultura hacia el bienestar laboral.

Debes saber que nunca es tarde para sumarte a esta corriente que maximiza el potencial global. En este artículo podrás explorar las claves para gestionar y reducir el estrés laboral por la pandemia.

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5 claves para combatir el estrés laboral por la pandemia

¿Cómo la pandemia afecta el bienestar emocional de los trabajadores?

La crisis mundial del coronavirus tuvo un gran efecto en el estado mental de los empleados, el cual aún sigue latente. El miedo a la enfermedad y a lo desconocido hizo mella en sus niveles de ansiedad.

Muchos trabajadores experimentan niveles elevados de tensión, preocupación e incluso depresión al enfrentarse a tiempos difíciles. La interrupción de la vida cotidiana y la migración al trabajo a distancia también generaron un sentimiento de soledad o de excesiva desconexión.

El primer paso es que las empresas reconozcan la importancia de la salud mental para garantizar un ambiente constructivo. Ofrecer asistencia y fomentar la comunicación abierta, son buenas vías para demostrar tu interés por gestionar el impacto psicológico de la pandemia.

Esta crisis no sólo ha alterado las rutinas laborales, sino también el día a día personal, difuminando las líneas que separan el trabajo del hogar. Esto implicó exigencias ampliadas: compaginar el cuidado de los niños, de la casa o de personas dependientes en el mismo entorno de trabajo.

Esta falta de equilibrio generó un estrés laboral por la pandemia hasta entonces desconocido, ya que nadie tuvo tiempo de prever tantos cambios repentinos. Además, a todo ello se unen las escasas oportunidades de ocio para despejarse.

A pesar de que actualmente la situación sanitaria se haya estabilizado, es lógico que las consecuencias del estrés laboral por la pandemia se sigan manifestando en forma de secuelas físicas y mentales.

¿Cuáles son las consecuencias mentales de quedar expuesto a una situación estresante y prolongada? A continuación, podrás descubrir las más comunes:

Trastornos de ansiedad: Desarrollarla como trastorno implica la posible aparición espontanea de ataques de pánico en momentos con un mínimo componente de tensión. Los efectos de la ansiedad conllevan un estado de alerta y nerviosismo constante.

Depresión: Esta enfermedad es mucho más grave que un simple sentimiento de tristeza, superarla requiere de bastante tiempo y apoyo. Para los pacientes es común experimentar una falta de interés generalizada que afecta gravemente a su vida profesional.

Desequilibrios de sueño: Dormir bien es uno de los requisitos fundamentales del bienestar mental. Cuanto tu rutina se ve alterada, abundan las preocupaciones o estás obligado a un mayor sedentarismo, es común que esto modifique el ritmo circadiano, que debería actuar como un reloj.

Agotamiento emocional: Implica la sensación constante de estar abrumado por una falta de recursos para afrontar los desafíos cotidianos. En este contexto, es fácil estallar y sufrir graves desequilibrios en el comportamiento.

Dificultades cognitivas: Cualquier trabajador expuesto a un estrés prolongado lidiará con deficiencias en su capacidad memorística, su toma de decisiones y su concentración. Todo ello implica un rendimiento laboral totalmente improductivo.

El estrés laboral por la pandemia

El COVID-19 supone un claro ejemplo de lo que en psicología se conoce como “estresores”, que son elementos disparadores del estrés mental y que pueden variar en frecuencia, intensidad, duración y predictibilidad (Peiró y Rodríguez, 2008: 69). De hecho:

Lo que hace que una condición o situación sea estresante, es la falta de control personal para afrontar las altas demandas que provienen normalmente del ambiente cotidiano. Karasek (1979).

Por ello, el COVID-19 afecta la salud emocional y mental de millones de trabajadores en todo el mundo, más allá de la tragedia personal que ha supuesto para quienes han padecido la enfermedad o perdido a algún familiar.

Esto es debido a que una de sus consecuencias más notables ha sido el cierre de puestos de trabajo. Por ejemplo, en países como Estados Unidos la tasa de desempleo aumentó según la BBC. Pero en España la situación no ha sido muy distinta, dejando a miles de familias sin sustento económico.

Por otro lado, la gran mayoría de los que mantuvieron sus empleos, tuvieron que adaptarse al teletrabajo debido al confinamiento, situación totalmente nueva e imprevista, que conllevó el colapso de los servicios de internet o de las plataformas de conferencias online.

De esta manera, existe un tipo especial de estrés laboral por la pandemia, el conocido como síndrome de burnout. El trastorno fue acuñado por los psicólogos Herbert Freudenberger y Christina Maslach en los años 70.

Sus síntomas se desarrollan gradualmente y todos ellos se relacionan directamente con el desgaste laboral: despersonalización, baja realización personal…Pero también interfieren dificultades a un nivel físico.

En estos casos lo más importante es actuar con rapidez, poseer herramientas de prevención, lo cual implica abordar el tema abiertamente con toda la plantilla como una parte más de la formación profesional.

6 consecuencias del estrés laboral por la pandemia

La situación ha traído consigo varias ramificaciones en el entorno laboral que pasan factura a la salud física y mental. Todas estas consecuencias ponen de relieve la necesidad de incidir en recursos de afrontamiento efectivos.

Agotamiento físico y mental

La continua compulsión por cumplir los plazos en un nuevo contexto tiene un impacto perjudicial tanto en el cuerpo como en la mente. ¿Sabías que la fatiga mental puede ser igual o más perjudicial que el cansancio físico?

Por mucho que establezcas pausas regulares, si no eres capaz de encontrar la tranquilidad estos esfuerzos serán en vano. Por eso, en los tiempos que corren el autocuidado adquiere un significado aún más importante.

Practicar estrategias de relajación es imperativo, no solo como un compromiso personal, sino como parte de la rutina del equipo contra el estrés laboral por la pandemia. En momentos así, encontrar el apoyo en quienes viven circunstancias similares es crucial.

Por eso, sería recomendable realizar sesiones de grupo en las que cada integrante comparta con los demás como está lidiando con la rutina postpandemia, a qué situación concreta se enfrenta y qué métodos le ayudan a sobrellevarla.

Incluso deberías invitar a un experto para moderar las sesiones. Por otra parte, es igualmente aconsejable que propongas actividades recreativas antes y tras la jornada, para intentar restablecer los niveles de energía habituales.

Gestionando conscientemente el estrés, ansiedad y depresión, así como tomando medidas de prevención, los empleados podrán salvaguardar su salud después del confinamiento, pudiendo prosperar tanto personal como profesionalmente.

Dificultades de conciliación

Mantener un equilibrio entre lo laboral y lo personal se ha convertido en una problemática recurrente del estrés laboral por la pandemia. La constante conectividad y la ausencia de horarios definidos son algunos de los grandes retos.

Tus empleados deben poder recargar energías para dar lo mejor de sí mismos, así que evita los emails o mensajes de trabajo en determinados días o a partir de ciertas horas…

Aislamiento social

Una de las consecuencias más significativas del estrés laboral por la pandemia ha sido el aumento de la sensación de soledad debido al encierro. Para la mayoría de los trabajadores no es lo mismo comenzar saludando a sus compañeros o amigos, que tomarse un café solos desde casa.

A su vez, muchos equipos se han resentido, ya que la clave para hallar soluciones originales y efectivas es la conectividad entre personas innovadoras, cuyo proceso creativo se dificulta a través de una pantalla.

Por otra parte, las personas que ya eran tímidas o inseguras han perdido la costumbre de ir cada día al trabajo, teniendo que relacionarse con una variedad de colegas en diversos escenarios.

Todo ello deviene en un acomodamiento excesivo dentro de su zona de confort, desarrollando ansiedad social y estrés laboral por la pandemia al tener que empezar a interactuar de nuevo en persona tras el confinamiento. Esta problemática puede incluso desembocar en absentismo laboral.

Por si fuera poco, hay que ser consciente de que hemos estado expuestos a un bombardeo de noticias negativas en los medios de comunicación, además de a un uso excesivo de la tecnología y las redes sociales.

Aunque estas han servido para conectar a pesar de la distancia, también tienden a servir para idealizar las vidas ajenas en detrimento de la propia autoestima. Hecho que interfiere aún más a la hora de relacionarse exitosamente en un contexto originado por el estrés laboral por la pandemia.

Disminución de la productividad

La repentina transición al trabajo a distancia debido a la crisis mundial ha tenido un efecto perjudicial sobre el rendimiento, ya que los empleados luchan por mantener sus niveles habituales de eficiencia y concentración a raíz del estrés laboral por la pandemia.

Además, los departamentos de recursos humanos se han visto sometidos a una presión adicional para encontrar formas de ayudar a superar las dificultades de adaptación a las nuevas tecnologías y rutinas.

¿Conoces el concepto de “engagement laboral” y su importancia? También conocido como compromiso laboral, es la variable que trata de medir el nivel de conexión emocional, motivación intrínseca y verdadera dedicación del empleado.

Es evidente que tras el estrés laboral por la pandemia este elemento tan determinante se ha visto afectado, ya que establecer un sentido de pertenencia con la organización desde casa no es sencillo.

La crisis ha traído a la jornada una mayor sobrecarga de tareas, sin poder beneficiarse de los aspectos positivos que conlleva ir a trabajar cada día, de cara a la estabilidad personal.

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Cuidar la salud emocional y mental después de la pandemia

Conflictos interpersonales

El aumento de la ansiedad y la depresión puede crear tensiones innecesarias entre los compañeros. Estos conflictos se generan a raíz de disparidades de puntos de vista, estilos de trabajo o incluso por temas personales. Pero la cuestión es que todo se intensifica.

Es esencial que tanto ambas partes como las organizaciones gestionen estas disputas con eficacia para preservar un entorno laboral saludable y disminuir el estrés laboral por la pandemia. Si dos miembros no toman la iniciativa de colaborar mutuamente, todo el equipo puede verse perjudicado.

Por eso, en tiempos difíciles, es imperativo promover valores como la compasión, la solidaridad y la empatía como parte de la cultura organizacional. La clave es crear vías para el diálogo abierto.

Miedo al despido

Este temor es una de las fuentes principales del estrés laboral por la pandemia. La inseguridad laboral fomenta un estado perpetuo de malestar y miedo.

Los empleados tienden a dudar de su trabajo constantemente y temer que cualquier paso en falso pueda suponer la pérdida del empleo. Además, durante un periodo de turbulencias financieras, como la pandemia, escasean las oportunidades laborales.

Si percibes este miedo en el ambiente, no dudes en organizar una charla que infunda confianza y solidaridad a tus empleados. También puedes mostrarte abierto a organizar encuentros individuales con aquellos que se estén viendo más afectados para intentar hallar una solución viable y reducir el riesgo de que se presente el estrés laboral por la pandemia.

5 claves para combatir el estrés laboral por la pandemia

Priorizar la salud física y mental del equipo

Anteriormente, era común escuchar que dos de cada tres personas sufren de estrés. El coronavirus ha agravado esta estadística. Por eso las organizaciones están llamadas a tomar las riendas en pro de la salud de su personal.

Esto implica no solo brindarles material de protección contra el COVID-19, sino también a nivel emocional y así evitar el estrés laboral por la pandemia. Por eso, durante un tiempo quizá debas dejar de lado ciertos objetivos empresariales para concentrarte en impulsar iniciativas de salud mental.

Permitir la flexibilización de agendas

Lo ideal es que la productividad de un empleado no se vea mermada por trabajar de manera forzada en una época emocionalmente compleja, sino darle la libertad de conectarse cuando pueda, si las condiciones de su puesto así lo permiten.

Permitir horarios flexibles y personalizados demuestra a cada trabajador que realmente te importa el estrés laboral por la pandemia, no solo a través de palabras sino de actos. Esta medida puede ser una fuente poderosa de engagement laboral.

Buscar acompañamiento psicológico

Aunque es lógico que la mayoría de la plantilla se encuentre algo más desmotivada, debes notar que en ciertos casos los problemas anímicos van más allá. Muchos empleados requieren de ayuda especializada para gestionar el estrés laboral por la pandemia.

Mi recomendación es que, a ser posible, se le brinde asesoría emocional y apoyo en la aplicación de los preceptos de la inteligencia emocional en el trabajo. El equipo lo agradecerá especialmente, ya que costearse un psicólogo no está al alcance de todo el mundo.

Evitar las tareas innecesarias

Esto incluye las innumerables reuniones de “zoom” que no tienen un objetivo claro, y que solo restan tiempo al trabajador para lograr conciliar con sus obligaciones personales.

En momentos de sobreestimulación hay que aprender a ser precisos y saber manejar los tiempos a nivel colectivo para evitar el estrés laboral por la pandemia. Es esencial buscar la eficiencia durante el trabajo para poder intercalar las funciones con momentos de calma.

Es decir, ahora la relajación también formará parte de los objetivos corporativos con tal de mitigar el estrés laboral por la pandemia, y los múltiples perjuicios que acarrea.

Escucha y sé empático con los empleados

Esta es una recomendación de por vida, para cualquier empresa y bajo cualquier circunstancia. Pero aún más cuando padecen del estrés laboral por la pandemia, ya que muchos están viviendo diariamente desde el miedo a la inestabilidad financiera o lidiando con posibles pérdidas familiares.

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Infografía sobre el estrés laboral por la pandemia

Recomendaciones sobre las 5 claves para combatir el estrés laboral por la pandemia

Por todas estas razones, es esencial que las personas den prioridad al autocuidado y establezcan límites, salvaguardando su salud mental en pandemia y evitar el estrés laboral por la pandemia. Incorporar pausas regulares, entregarse a actividades placenteras y buscar la ayuda de compañeros son puntos básicos del mundo post pandemia. Por si fuera poco, hay que tener en cuenta el impacto del estrés en la seguridad.

El año 2022 fue especialmente complicado en cuanto a siniestralidad laboral en España, con más de 653.000 accidentes que causaron baja y más de medio millón que no la causaron según el Ministerio de Trabajo.

Entre sus múltiples motivos destaca el estrés laboral por la pandemia. El hecho es que la ausencia laboral por problemas mentales como la ansiedad o depresión ha aumentado un 17% en los últimos años. Se estima que dichas ausencias tienen un coste anual total de casi 400 millones de euros.

Por eso, este momento es perfecto para comenzar a tomar una conciencia real sobre la salud a todos los niveles. ¿Te gustaría seguir descubriendo técnicas para lograr esta implicación en tu empresa?

Entonces, te invitamos a participar en nuestra Academia de Emociones La Experiencia. Este programa se trata de cinco días con un conjunto de expertos, mientras viajas, conoces gente nueva y realizas actividades para preservar el bienestar emocional en una ciudad tan emblemática como Jerez de la Frontera.

Mejorarás habilidades tan esenciales para la prevención como son la autoestima, el autocontrol o la toma de decisiones gracias a técnicas concretas ¿A qué esperas para apuntarte?