Dra. Estrella Flores-Carretero.

¿Compruebas constantemente tu teléfono, incluso cuando no hay ninguna notificación? ¿Te sientes ansioso o estresado cuando te lo olvidas en casa? Si es así, puede que padezcas nomofobia, o adicción a los teléfonos inteligentes.

En 2013, el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales de la Asociación Americana de Psiquiatría (DMS-V) incluyó a la nomofobia dentro del espectro de patologías asociadas a la ansiedad y la depresión.

Respecto a los adolescentes y la adicción móvil, la cuestión se vuelve aún más preocupante. Según Common Sense Media en 2019, aproximadamente el 56% de ellos se sienten presionados para responder inmediatamente a los mensajes, lo que demuestra que cada vez más hay más adolescentes adictos al móvil.

Así que, si quieres mejorar tu salud mental y física, sigue leyendo para aprender a liberarte de las cadenas de la nomofobia. En este artículo te proporcionaremos estrategias efectivas para favorecer un uso equilibrado del teléfono móvil.

nomofobia en ieie

6 señales de que sufres nomofobia o adicción al móvil

¿Qué es la nomofobia?

La nomofobia, término acuñado por investigadores británicos en 2008, denota el temor a verse privado de un teléfono móvil. Esta fobia provoca sentimientos de nerviosismo, preocupación e inquietud.

El término es una mezcla de “sin móvil” y “fobia”, lo que sugiere una dependencia psicológica del smartphone. A medida que se ha generalizado el uso de los teléfonos e internet, la nomofobia es cada vez más frecuente.

La adicción a los móviles, suele pasarse por alto, pero tiene el potencial de causar graves daños a la salud mental y física. La adicción al móvil no se limita al miedo a separarse del propio dispositivo. También se asocia al temor a perder la conexión, a estar fuera de onda y a perderse noticias importantes.

Las personas que padecen adicciones al móvil consultan compulsivamente sus teléfonos, incluso cuando no hay ninguna notificación, y sienten la necesidad de permanecer conectadas en todo momento. Por tanto, es esencial reconocer los síntomas para poder tomar medidas efectivas y así poder hacer unuso saludable del móvil.

¿Quiénes son las personas más propensas a la nomofobia?

Pacientes de todos los orígenes pueden ser adictos al móvil, aunque ciertos grupos son más vulnerables. Los estudios certifican que para los adolescentes, así como en el caso de los adultos jóvenes, son los más propensos a convertirse en adictos al celular, ya que han crecido con teléfonos inteligentes.

Además, quienes tienen trabajos agotadores o actividades que implican una conexión constante con el smartphone también son más propensos a sufrir nomofobia.

Las personas que sufren de ansiedad o depresión también corren un mayor riesgo. Pueden utilizar sus teléfonos como medio de distracción de sus estados de ánimo, lo que da lugar a un apego insano. Además, también influyen en la propensión los antecedentes de otras adicciones.

Por otro lado, quienes ansían la aceptación social son más susceptibles a la nomofobia, este es el caso de los adolescentes adictos al móvil. Las redes sociales y otras aplicaciones de mensajería ofrecen gratificación instantánea en forma de «me gusta», comentarios o mensajes, a los que puede ser difícil resistirse.

Causas de la nomofobia

La dependencia del móvil es un fenómeno creciente en la sociedad moderna. Esta adicción conductual puede atribuirse a numerosos factores, principalmente a la necesidad de conexión constante y validación ajena que caracterizan a la era digital.

Las redes sociales han generado un entorno en el que las personas se sienten obligadas a comprobar las actualizaciones, lo que deviene en un círculo vicioso de ansiedad. Esta necesidad también es un signo de baja autoestima y de falta de inteligencia emocional.

Otro factor en el desarrollo de la nomofobia es la noción de que el teléfono es indispensable para el funcionamiento diario. En la actualidad, desempeñan un papel integral en la comunicación, la navegación y el entretenimiento. Por eso cada vez hay más adolescentes adictos al móvil.

La comodidad y accesibilidad que caracteriza al smartphone dificulta el descanso a la tecnología. Sin embargo, es crucial encontrar aficiones que se alejen del entorno virtual, preferentemente al aire libre, para comprobar fácilmente como su uso no es indispensable para el ocio.

La constante afluencia de estímulos también contribuye al desarrollo de la nomofobia. Con el acceso preferente a las noticias, las personas pueden sentirse abrumadas por el aluvión de información.

En aras de combatirlo, el desarrollo de la gestión emocional y la práctica de la atención plena ayudan a manejar la relación con la tecnología para reducir las consecuencias de la nomofobia eficazmente.

¿Cómo saber si sufres adicción a los teléfonos inteligentes?

¿Dedicas más tiempo a tu teléfono que a otras actividades, como pasar tiempo en familia o dedicarte a otras aficiones? ¿Te sientes impulsado a consultar constantemente tu dispositivo incluso cuando estás en medio de una conversación o tarea? Estos son indicadores potenciales de nomofobia.

Es importante comprender que este tipo de adicción puede tener efectos adversos en el bienestar general a corto y largo plazo. Si crees estar sufriendo adicción a los móviles, es crucial que tomes medidas para reducir su uso y distanciarte progresivamente.

Presta mucha atención a estos puntos, pues si cumples con dos o más de ellos, puede ser una señal ineludible de abuso del móvil:

  • No tienes retentiva y tienes que pedir que te envíen un mensaje con información detallada o recordatorio.
  • Te despiertas y lo primero que haces es revisar el teléfono.
  • Estás más pendiente de tomarte selfies o fotos del lugar donde estás, en vez de disfrutar del momento.
  • Cuando vas a ver una película con alguien, te pide de antemano que guardes el teléfono.
adolescentes adictos al movil ieie

Existen muchos adolescentes adictos al móvil

6 signos físicos de la nomofobia

Descuidar estos síntomas tiene graves repercusiones en la salud general y la prosperidad del individuo, sobre todo prestando atención a la nomofobia en niños. Los más frecuentes son los siguientes:

Insomnio

La incapacidad para conciliar el sueño es un síntoma habitual que experimentan estos pacientes. La luz azul que irradian las pantallas de los teléfonos también puede obstruir el ciclo normal de siesta.

El insomnio causa agotamiento, mal humor y problemas de concentración durante el día, lo que perjudica a la vida cotidiana, además de a la productividad laboral. Contrarrestar el insomnio debido a la nomofobia implica establecer una rutina saludable a la hora de acostarse.

Esto incluye fijar una hora concreta para apagar todos los dispositivos electrónicos, al menos una hora antes de acostarse. Como alternativa a navegar por las redes sociales, prueba a leer un libro o a realizar técnicas como la respiración profunda. La finalidad es calmar la mente, predisponerla a un tranquilo descanso nocturno.

Pero también puede ser útil determinar momentos específicos para inspeccionar los correos electrónicos durante el día y apagar el teléfono durante las comidas con amigos y familiares. No se trata de eliminar el uso tecnológico, sino de alcanzar un equilibrio saludable.

Si persiste el insomnio, buscar ayuda profesional es lo más beneficioso. Un terapeuta puede proporcionar métodos para gestionar el estrés asociado a los adictos al móvil antes de que este empeore.

Estrés y ansiedad intensos

Quienes padecen esta afección sufren de una ansiedad abrumadora cuando se ven privados de sus dispositivos, lo que provoca una serie de efectos debilitantes para el sistema inmunológico.

Así, un síntoma clave de la nomofobia es la angustia y la agitación que surgen al intentar desconectar. Esto provoca reacciones físicas como un aumento de la frecuencia cardiaca o sudoración, relacionadas con una sensación de pánico generalizada.

Dificultad para concentrarte

¿Te has notado alguna vez fijado en el teléfono durante un tiempo prolongado, perdiendo completamente la noción del tiempo? Este es uno de los síntomas de nomofobia más determinantes.

Esta dificultad para concentrarte puede deberse a una necesidad persistente de comprobar las notificaciones. Es esencial detectar este indicio a tiempo para evitar resultados posteriores, por ejemplo, una gran disminución del rendimiento laboral o académico.

Cuando te molestan las dificultades de concentración debidas a la nomofobia, es habitual experimentar una sensación de inquietud y desasosiego constante, dificultando la ejecución de tareas que requieren verdadera atención.

En algunos casos, puede incluso provocar una reducción de la capacidad retentiva, haciendo que te distraigas rápidamente y no puedas terminar el trabajo o completar actividades importantes.

Para luchar contra las dificultades de concentración, es importante poner límites desactivando las notificaciones “push” e incluso utilizar aplicaciones con el fin de alcanzar un uso saludable del móvil.

Sensación de FoMo

Este impulso persistente de permanecer conectado incluso cuando no es necesario se conoce como «FoMo». Es un miedo asociado a los riesgos de internet que puede hacer que los individuos se sientan distantes del mundo y de su entorno social.

Los pacientes de nomofobia son especialmente propensos a la sensación de FoMo. Las personas tienen dificultades para explorar nuevas oportunidades porque están demasiado ocupadas mirando su teléfono.

Esto da lugar a un sentimiento de soledad y aislamiento, que agrava la ansiedad. En resumidas cuentas, es el miedo a perderse cosas. Por eso tienden a estar permanentemente conectados creyendo erróneamente que todo lo relevante se produce en un contexto digital.

Su intención original es evitar el aislamiento social, pero justamente están promoviendo esta sensación sin darse cuenta. También tienden a querer asistir a todo tipo de eventos para no sufrir más tarde viendo las publicaciones de sus amigos en las redes, es así como se establece un sistema de prioridades insano.

Síndrome de la vibración fantasma

El síndrome de la vibración fantasma es una consecuencia que aqueja a muchos nomofóbicos. Se trata de sentir o escuchar un zumbido persistente que realmente no existe.

La causa del síndrome tiene muchas teorías. Algunos especulan que es consecuencia de la hiperestimulación del cerebro por el uso excesivo del teléfono. Otros creen que es una respuesta psicológica al miedo a perderse algo, o FoMo.

Sea cual sea la causa, está claro que este problema puede tener un efecto muy perjudicial sobre la salud mental. Experimentan síntomas de agitación física si no responden rápidamente a los mensajes.

Recuerda que pedir apoyo a especialistas o familiares es esencial para superar la nomofobia, confiesa tus temores sin ningún tipo de vergüenza, ya que actualmente cualquiera está expuesto a sentirse de esta manera.

Irritabilidad

¿Tu estado de ánimo se altera cuando no localizas el teléfono o se ha quedado sin batería? La irritabilidad es uno de los indicios físicos asociados a esta afección, ya que no solo afecta en términos psicológicos.

Así que si notas que te pones más irascible de lo habitual cuando tu teléfono está fuera de alcance, puede que haya llegado el momento de examinar más a fondo tu relación con la tecnología.

El estado de ánimo inestable tiene diversas consecuencias físicas, además de perjudicar notablemente tus interacciones sociales. A continuación, se enumeran algunas de las más frecuentes:

  • Tensión muscular: El estrés y la irritabilidad crónica, es decir, tras un periodo prolongado, causa dolor de espalda, de cabeza y rigidez muscular en diferentes partes del cuerpo.
  • Trastornos gastrointestinales: Causando afecciones en el sistema digestivo como dolor abdominal, diarrea, estreñimiento e incluso exacerbación de condiciones como el síndrome del intestino irritable.
  • Cambios en el apetito: Algunas personas pueden tener una disminución o aumento acusado del apetito, lo que conlleva cambios de peso insalubres e incluso el desarrollo de trastornos de alimentación.
  • Dolores de cabeza: El estrés emocional puede desencadenar dolores tensionales o migrañas intensas que se agravan si estás enganchada al móvil.
  • Problemas cardiovasculares: Es habitual un aumento de la presión arterial y el ritmo cardíaco. Estos cambios incrementan el riesgo de desarrollar enfermedades graves a largo plazo.
  • Supresión del sistema inmunológico: Este debilitamiento aumenta la propensión a todo tipo de infecciones, ya que es el sistema encargado de defender nuestro cuerpo.

Es importante destacar que estas consecuencias pueden variar notablemente de una persona a otra y que los efectos son el resultado de un ánimo inestable cronificado. Si experimentas síntomas persistentes o preocupantes, es recomendable buscar ayuda médica para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados.

Por otra parte, existen otras señales que no deberías pasar por alto a la hora de considerar la nomofobia como: las contracturas de cuello constantes, el desarrollo del túnel carpiano o la resequedad y tensión ocular.

Estrategias para controlar el uso del móvil y reducir el riesgo de nomofobia

En el mundo actual, los smartphones se han convertido en una parte inevitable de la vida. Por desgracia, su uso excesivo puede provocar nomofobia. Sin embargo, no te preocupes, ya que hay medidas efectivas para controlar el uso del móvil y disminuir las probabilidades de desarrollar el trastorno:

  • Establece un horario digital realista: Existen aplicaciones que pueden controlar y restringir el uso, algunos dispositivos incorporan la posibilidad de consultar un informe automático de actividad.
  • Desarrollar la inteligencia emocional: La autoconciencia te permite procesar las consecuencias sentimentales, propias y para tu entorno, de la dependencia tecnológica. Con el objetivo de adquirir la voluntad necesaria a la hora de tomar medidas efectivas.

La relación emocional con la prevención de esta problemática está científicamente comprobada, tal y como indica el artículo académico “Inteligencia emocional, adicción al smartphone y malestar psicológico como predictores de la nomofobia”.

  • Practica la atención plena: Ser consciente de tu entorno, pensamientos y sentimientos puede reducir el estrés
  • Establece zonas libres de teléfonos: Designa áreas de tu hogar donde no se permita el uso, como el dormitorio o la mesa de trabajo.
  • Practica la autorregulación: Antes de desbloquear tu teléfono, tómate un momento para reflexionar sobre si realmente lo necesitas en ese momento. Aprende a controlar tus impulsos y a diferenciar entre el uso necesario o el compulsivo.
  • Establece metas y recompensas: Fija objetivos realistas para reducir gradualmente el tiempo que pasas en el móvil, recompénsate cuando las alcances. Puede ser algo tan simple como disfrutar de un pasatiempo o darte un capricho inusual si lo logras.
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Infografía sobre la Nomofobia

Recomendaciones finales sobre las 6 señales de que sufres de nomofobia

Por tanto, la nomofobia, el miedo irracional a estar sin el teléfono móvil, puede parecer una realidad abrumadora en la era digital. Sin embargo, en medio de esta ansiedad, se encuentra una oportunidad para reflexionar y reconectar con lo que verdaderamente importa.

Está claro que los adolescentes y la adicción al móvil están preocupantemente relacionados en la actualidad. Además, este uso excesivo también se asocia con otros riesgos importantes como los accidentes de seguridad vial.

Recuerda que puedes tomar el control de tu relación con la tecnología de muchas maneras, estableciendo límites adecuados a tus circunstancias, o buscando ayuda profesional para abordar las causas subyacentes.

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