Dra. Estrella Flores-Carretero.

¿Te va a tocar trabajar con amigos o estás pensando asociarte con alguno para impulsar un emprendimiento? Una amistad puede ser una muy buena o una mala compañera de trabajo, según la personalidad de los involucrados. Aunque no es lo más recomendable, a veces puede ser la mejor decisión.

Si queremos trabajar con un amigo, bien sea porque ambos habéis sido contratados en una misma empresa, o porque estáis considerando crear una propia, es necesario que tengáis en cuenta algunos factores relevantes. El primero de ellos es que existen distintos tipos de amistades.

Debéis tener muy en claro que si vais a trabajar con amigos, es porque sois conscientes todos de que, cuando hay dinero involucrado, las relaciones pueden cambiar de color, y que sois lo suficientemente maduros y responsables para afrontarlo.  

Pregúntate: ¿Vale la pena poner al fuego una relación de amistad por un empleo? ¿Tenéis una comunicación lo suficientemente flexible y sincera como para poneros a las brasas? Tanto si la respuesta es positiva como si no, os invito a leer esta reflexión que he hecho al respecto, en el mundo corporativo.

trabajar con amigos ieie

Trabajar con amigos

10 consejos para trabajar con amigos sin perder la amistad

¿Por qué querrías trabajar con amigos?

Una amistad puede ser una buena o mala compañera de trabajo. La verdad, este es un tema bastante complejo y subjetivo, en el que entran en juego diferentes factores. Y sí, hay relaciones de relaciones: no todo socio sería un buen amigo, ni todo amigo sería un buen socio.

Se está más en la oficina que en casa . Particularmente, creo que ambos escenarios deberían estar separados; sin embargo, también considero que es una visión general de generaciones anteriores. De hecho, se sabe que a los millennials les va bien juntar amigos y amistad dentro de sus propuestas laborales.

Pero trabajar con amigos puede ser una experiencia enriquecedora, en donde la relación de amistad puede estrecharse muchísimo más; si sois capaces de poneros de acuerdo en asuntos de dinero, de confiar hasta ese punto, entonces podréis sacar adelante cualquier emprendimiento.

De la misma manera ocurre si vais a comenzar a trabajar con un amigo en la misma organización; no obstante, me gustaría que tuvierais en cuenta que el hecho de tener una amistad con alguien, no implica que compartáis las mismas inquietudes en otros ámbitos de la vida.

¿Qué deberías tener en cuenta antes de trabajar con amigos?

Antes de asociarse con familiares o trabajar con amigos, tened en cuenta que la confianza es esencial. Ella nace tras largas horas de convivencia. No os ceguéis porque existe un lazo afectivo de por medio; después de todo, tampoco tenemos la misma relación con todos nuestros seres queridos.

De acuerdo con García Tamariz (2020), debemos comprender que para la existencia de un clima organizacional, debe haber satisfacción laboral, en donde el soporte social es uno de los elementos de peso, es decir, el apoyo emocional entre colegas, que sería como trabajar con un amigo.

Las personas solemos tener conductas distintas con nuestros allegados y en la oficina; de hecho, es muy probable que ambas imágenes sean diametralmente opuestas, pues no es lo mismo sentarse a conversar de manera relajada, cerveza o café por medio, que llegar a acuerdos monetarios.

Por eso, es importantísimo poner todo por escrito. Especialmente cuando existe una relación de amistad, los involucrados deben aprender a separar la esfera pública de la privada, y no abusar de la confianza brindada para entregar tareas a destiempo, o incumplir con los tratos acordados. 

Las 5 ventajas de trabajar con amigos

Antes de dejaros algunos consejos para amigos que desean emprender un proyecto laboral en conjunto, os quiero compartir algunas ventajas que se podrían obtener de todo ello; después de todo, una amistad puede ser el lugar más indicado para encontrar al mejor socio. Veamos:

Clima laboral agradable

Pasamos la gran parte de nuestro tiempo trabajando, así que no es de extrañarnos que nuestra relación con compañeros y jefes se fortalezca con el tiempo. Pero, por supuesto, al final son solo eso. Cuando trabajas con tu familia o con amistades, la cosa es diferente, pues prevalece un vínculo afectivo.

Una de las grandes ventajas de trabajar con un amigo es que ya os conocéis, así que las dinámicas pueden fluir más fácilmente. La tertulia, el buen ánimo, son factores que suben el ánimo, y llenan de optimismo el ambiente; además, pueden ayudar a aligerar las cargas en situaciones de crisis.

Mayor disposición a ir a trabajar

Del punto anterior se desprende que trabajar con amigos hace que tengamos mejor ánimo para ir a la oficina, porque sabemos que a pesar de la jornada, seguramente lo pasaremos bien. Me atrevería a decir que incluso, en algunos casos, es mejor que quedarse en casa, ¿o me equivoco?

Especialmente cuando las personas están en un puesto de trabajo que no les complace mucho o que simplemente la monotonía ha hecho que se pierda el gusto por ir a trabajar. Si sabes que tus amigos van a estar allí, probablemente sea más ligera la jornada, y las horas se vayan en un abrir y cerrar de ojos.

Apoyo emocional

Las cosas en la oficina no siempre son color rosa: existen roces, puede que un objetivo no se cumpla, algún llamado de atención por parte de superiores, un cliente que no se pudo cerrar, …. Nos vamos con todas esas preocupaciones a casa, en donde en vez de hablarlo, queremos olvidarlo.

Tu familia puede escucharte porque te quiere, pero a veces no comprenden mucho de lo que les estás hablando, especialmente cuando no saben mucho de tu área. Al trabajar con amigos, las cargas suelen ser más llevaderas, pues estarán allí para escucharte, darte ánimos y aconsejarte antes de ir a casa. 

Sentido de pertenencia

Trabajar con amigos puede hacer que nuestro orgullo de pertenencia se dispare, porque al haber afinidad en el equipo de trabajo, además del bienestar físico y emocional que puede brindarnos, nos sentiremos felices y satisfechos de la conexión que puede existir entre quienes nos acompañan.

Tener amistades en la oficina, cuando hay un equilibrio adecuado, hace que la genuinidad de la relación empape el trabajo en equipo, gracias a la buena disposición y entendimiento de las partes. Esto hará que el resto de las personas con la que compartimos, también se sientan cómodas en el grupo.

Mejora las habilidades comunicativas

Trabajar con amigos puede beneficiar nuestra capacidad de comunicación con los demás, especialmente cuando se trata de personas a las que les cuesta integrarse o participar por ser introvertidas. Tus amistades pueden crear un ambiente seguro, en el que puedas expresar tus ideas sin temor alguno.

Las buenas charlas generan confianza. Imagina que tengas una reunión importante con tu jefe, con un socio o un posible cliente. Si tienes la suficiente confianza con quienes trabajas, podrás practicar con antelación cuáles serán las palabras a utilizar, y recibirás un feedback positivo que te alentará. 

Las 4 desventajas de trabajar con amigos

No obstante, trabajar con amigos tiene su parte difícil, la cual lamentablemente a veces tiene más peso que lo positivo. En mis años dentro del mundo corporativo, he visto amistades deshacerse como arena entre las manos, porque los malentendidos causan discordia. Así que tened presente que:

Pueden ser un elemento distractor

Por supuesto, si trabajar con amigos hace que el ambiente sea más jovial, justamente por ello puede ser tu dolor de cabeza. De hecho, pueden convertirse en parte de los factores externos dentro de los ladrones del tiempo, ya que la cháchara puede convertirse en interrupciones constantes.

Aprendamos a crear límites. Ya sé que sois todos adultos, que atrás quedaron los años del bachillerato o la ESO, donde vuestros maestros os llamaban la atención por juntarse a hablar con el compañero de al lado, pero la verdad es que para algunos adultos, la situación no es muy diferente que digamos. 

Es difícil ser objetivo 

Pensemos en un momento en que nos ha tocado trabajar con amigos, y que nos piden nuestra opinión para un ascenso. Uno de los candidatos es un buen empleado, que tiene años trabajando en la empresa; el otro es vuestro favorito, que también lo hace bien (o puede que no tanto). ¿Qué hacer?

Lamentablemente, sobran los ejemplos donde el amiguismo se antepone en las organizaciones, y se pierden grandes oportunidades de crecimiento por darle el puesto a alguien a quien consideramos más cercano, pero que quizás no tiene la misma experiencia y conocimiento que otros empleados. 

Puede generar tensiones con terceros

Evidentemente, una de las más grandes desventajas de trabajar con amigos es que es altamente probable que, en caso de algún altercado, salgáis todos de buenas a primeras a meter la mano por vuestras amistades; después de todo, se supone que les conocéis más que a nadie en la organización.

Eso podría sonar bien en un principio, pero ¿y si es el otro quien tiene la razón? ¿Cómo lograr que la armonía del equipo no se rompa, sin que por ello vuestra amistad se vea afectada? Como veis, es un tema que puede ser bastante delicado, si desde el inicio no se crean normas de convivencia.

trabajar con un amigo ieie

Trabajar con un amigo

Se puede perder la amistad

Al final, todos y cada uno de estos detalles van sumando en contra. Las tensiones hacen que todo se eche a perder. Amigos y amistad se van al foso porque ninguna de las partes comprendió que no es lo mismo compartir un asado que responsabilidades laborales

10 consejos para trabajar con amigos sin afectar la productividad de la empresa

Sí, trabajar con amigos puede ser difícil, pero no imposible. Muchas de las grandes corporaciones tech en la actualidad nacieron de los esfuerzos mancomunados de jóvenes amigos, y lo mismo ha ocurrido con cientos de empresas a lo largo de los siglos. Estas son mis recomendaciones al respecto:

Antes de ser socios, también son amigos

Cuando toca trabajar con amigos, y si en verdad os importa mantener el afecto, debéis ser conscientes de que hay una relación afectiva de por medio, para bien o para mal, así que lo más sabio es aprender a no tomarse las cosas a modo personal, ni mucho menos redirigirlas con ese fin.

Tomad justamente esa buena química que habéis hecho fuera de la empresa, para potenciar vuestro teambuilding: aunque dentro seáis socios o compañeros de trabajo y vuestras actitudes cambien en el entorno laboral, sois las mismas personas de siempre.

Trabaja con amistades con quienes la convivencia es más factible

Creo que para trabajar con amigos y que la relación no se vea afectada, lo primero que debemos hacer es filtrar. Así es. Nuestras relaciones no son iguales con todo el mundo: están las personas con quienes iríais de fiesta, otros a quienes les pedirías consejo, o puede que una persona cumpla ambas.

Sería muy ingenuo de vuestra parte pensar que solo porque os lleváis bien en las comidas, porque habéis ido juntos en el verano,  sois los socios más adecuados. En una empresa entran en juego relaciones de poder, intereses y objetivos personales, ¿sabríais manejaros bien en dicho contexto?

Contexto diferente, actitudes diferentes

Como bien mencioné anteriormente, para trabajar con amigos debemos tener la suficiente madurez como para entender que no es lo mismo estar en la playa que asumir las riendas de un equipo de trabajo, pues las actitudes y la disposición no son las mismas. Por eso es importante no tomarse las cosas a pecho.

Entiende que cada quien tiene un estilo de trabajo

Y no por eso es una mala amistad. Hay quienes funcionan como un relojillo de precisión, otros que son más flexibles, y un largo etcétera. Lo importante es que al final del día, los distintos modos de asumir el trabajo sean compatibles, y que la comunicación fluya, o la empresa y el equipo estarán destinados al fracaso.

Establece límites para proteger la amistad

Uno de los primeros acuerdos que debéis tomar al trabajar con amigos, es que más allá de todo, establezcáis reglas claras sobre cómo manejarse dentro del equipo de trabajo y con el dinero, sin que por ello vuestra relación se vea afectada. Como dicen por allí: cuentas claras conservan amistades.

Evita que en la empresa se sepa de vuestra amistad

Vuestra amistad y el trabajo no tienen nada que ver. Especialmente en el caso de aquellas personas que sean compañeros de trabajo o familiares, es indispensable evitar chismes, dimes y diretes. Si tenéis una relación de pareja en la empresa, os dejo un artículo con algunas reglas básicas.

Practica la comunicación asertiva

Hablar con claridad debe ser una normativa, independientemente de que solo estemos frente a un compañero de trabajo. Específicamente, cuando trabajamos con alguna amistad, dejar las cosas claras os ayudará a que la relación se mantenga frecuentemente en buenos términos.

No compares los logros individuales

La envidia es una emoción muy humana. No nos hace menos personas, si estamos dispuestos a confrontarla y utilizarla como gasolina para crecer y ser mejores, sin pasar por encima de nadie. Si vais a trabajar con un amigo, ambos deberíais tener en cuenta que cada uno tiene sus fortalezas y su propio andar.

Mantén una actitud profesional

Aunque nadie es perfectamente objetivo, especialmente cuando hay una relación de por medio, a veces es indispensable tomar decisiones difíciles. La buena comunicación es indispensable para dejar las cosas claras, y dejar la amistad fuera cuando las cosas en el equipo sean difíciles.

Crea otras amistades en la empresa

Es normal que tras tantas horas compartiendo espacio, una relación laboral fluya más allá de la oficina. Eso está bien, siempre y cuando mantengáis la profesionalidad dentro. Tanto si compartís trabajo con un amigo como si no, os aconsejo que os deis la oportunidad de conocer a vuestros compañeros.

infografia trabajar con amigos ieie

Infografía sobre como trabajar con amigos

Recomendaciones sobre cómo trabajar con amigos y no perder la amistad

Ojalá todos estos consejos para amigos que desean trabajar juntos, os sean de gran ayuda. Bien, os dije en un principio que no soy gran fan de este tipo de situaciones, pero creo que nada verdaderamente está escrito al respecto que lo haga un hecho infalible. 

Lo primordial es que antes de empezar cualquier proyecto, os sentéis a conversar francamente, con el fin de aclarar todos los puntos y llegar a acuerdos que preserven vuestra amistad. De más está deciros que todo lo que acordéis deberá estar firmado en un papel. No deis nada por sentado.

Lo único que yo sé, es que sí seríais una mala amistad si al conocer el MasterMind Latino, no invitáis a vuestro amigo emprendedor, pues allí tendrá la oportunidad de coincidir con otros empresarios y líderes hispanos, con quienes puede crear una red de contactos valiosa para su proyecto.

En MasterMind Latino, vais a tener una oportunidad de oro, pues escucharéis durante tres días las experiencias y estrategias de los diez líderes corporativos del mundo hispano, de quienes podréis aprender muchísimo, especialmente cuando se trata de enfrentar situaciones de crisis en una organización.