Dra. Estrella Flores-Carretero.
Dejar de guardar rencor o soltar a una persona y el daño que nos ha causado, puede ser una de las tareas más difíciles a las que podemos enfrentarnos a lo largo de nuestra existencia. Para algunos es fácil perdonar, pero para otros no tanto, y hasta puede que nunca lo hagan.
¿Pero de qué depende la posibilidad de dejar de guardar rencor? A nivel inconsciente entran en juego distintas aristas, las cuales están sustentadas en nuestras propias historias de vida. Nadie puede apagar las emociones propias, o decir que es inmune a ellas, la diferencia está en dejarlas diluir.
Deshacerse de una persona que te hace daño o vengarte por lo sucedido no va a aliviar tus emociones, porque el recuerdo de lo hecho se mantendrá en ti. Insisto, nadie puede apagar los sentimientos. Lo único que puede ayudarte a dejar de guardar rencor es el trabajo interior que hagas en ti.
Sé que este puede ser un tema complicado. Por eso, antes de entrar en detalles y entender cómo deshacerse de la rabia acumulada, veamos cuál es la definición de rencor, cuál es su función, y las razones por las cuales para algunos es una emoción más manejable que para otros.
Dejar de guardar rencor y tener una vida más feliz
¿Qué encontrarás en este artículo?
7 pasos para dejar de guardar rencor y tener una vida más feliz
¿Qué es el rencor?
Este es un tema que ha sido abordado desde nuestros inicios como humanidad, y que tocan profundamente todas las religiones del mundo, pues saber perdonar puede ser un cuadro complejo para el hombre, que requiere una profunda reflexión, y la búsqueda de una vida en paz.
Si buscamos el significado de rencor en la RAE, encontramos que la palabra viene del latín rancor, que quiere decir “Resentimiento arraigado y tenaz”. Es una versión potenciada de la ira. Es un sentimiento con una carga negativa importante, por el sufrimiento que causa en quien lo siente.
A menudo se habla de la necesidad de vivir conectados a nuestro presente. Quienes sienten un profundo rencor, constantemente están rememorando en sus mentes situaciones pasadas hirientes, que alimentan el dolor y la ira que sienten, y que les guía a tomar decisiones radicales sobre su vida.
Más allá de dicha definición de rencor, debemos entender que quien lo padece se siente agraviada (o) por un suceso, y que dicho rechazo es firme y consistente, por tanto; es muy difícil de superar. Algunos le puede tomar muchísimos años superarlo, y otros simplemente nunca lo harán.
¿Es igual el enojo que el rencor?
Sí y no. Si bien ambas emociones dependen de la ira, cuando existe resentimiento es porque esta se ha potenciado y mantenido con el tiempo. Así que para dejar de guardar rencor, es necesario deshacerse de la rabia acumulada, tarea que puede resultar frustrante para muchas personas.
En pocas palabras, es una emoción que se ha enquistado y con la que muy difícilmente quien lo padece pueda lidiar con ello. Ser rencoroso (a) puede llevarte a sentir un enorme peso en tu vida, un lastre emocional muy duro que condiciona tus experiencias y relaciones con los demás.
La vida sería muy fácil si se pudiesen apagar las emociones, si todos tuviéramos la capacidad de soltar a una persona con cierta facilidad o quitar la rabia, la ira y el rencor acumulado con solo chasquear los dedos. Pero somos humanos, y no podemos evitar sentir lo que sentimos.
Lo único que podemos hacer por nosotros es atrevernos a indagar en nuestra propia historia de vida, y así cuestionarnos el porqué sentimos lo que sentimos ante ciertos estímulos o personas, y cómo podemos drenar esas emociones para que no se somaticen en nuestro cuerpo.
¿Qué siente una persona con rencor?
Quienes buscan dejar de guardar rencor lo hacen porque ya no quieren vivir atados emocionalmente a un evento pasado, una situación irremediable, y la única manera de lograrlo es cambiando de perspectiva con respecto a lo experimentado. Buscan una liberación.
Entienden que las distintas maneras cómo se manifiesta el rencor puede estarles perjudicando su salud, ya que esta es una emoción que eleva el ritmo cardiaco, y es una de las razones por las cuales muchas personas terminan sufriendo problemas coronarios o de presión arterial.
Buscar dejar de guardar rencor es intentar vivir una vida con más tranquilidad, a sabiendas de que la mejor manera de deshacerse de una persona que te hace daño es la indiferencia, que es lo verdaderamente contrario al odio, porque quiere decir que ya esa persona o esa situación no nos afecta.
Sin embargo, esto es algo muy difícil de lograr. Se requiere un profundo trabajo emocional a nivel individual para alcanzarlo.
¿Por qué se siente rencor?
Os conté anteriormente que dejar de guardar rencor no es tan fácil como apagar los sentimientos, pues las personas no somos robots. Si una persona detesta con sus entrañas a algo o a alguien, es porque en su historia de vida hay algún tópico al respecto, en donde la herida aún supura.
De hecho, todo el significado de rencor lo que esconde es una profunda desconfianza hacia los demás, lo que hace difícil construir relaciones sanas. Cuando creamos un lazo, nos exponemos a ser lastimados en vulnerabilidad. Es el otro quien debe cuidar de no herirnos, y viceversa.
¿Por qué unas personas son más rencorosas que otras?
Para algunas personas, es prácticamente imposible dejar de guardar rencor, y no nos toca a nosotros juzgar la manera en la que sienten. Sin embargo, otros individuos prefieren indagar en sí mismos e invertir tiempo en mejorar su autoestima e inteligencia emocional, para dejar de sufrir por.
- El rencor y resentimiento copiados como patrones de conducta de los padres o cuidadores.
- Individuos a los que desde temprana edad les enseñaron a reprimir lo que sienten.
- Aquellas personas que sienten dificultades para verbalizar sus emociones o con una pobre asertividad para decir las cosas de manera adecuada, en el momento indicado.
- Individuos con baja autoestima, que se sienten poco queridos o valorados.
¿Para qué sirve el rencor?
Si queremos dejar de guardar rencor es importante trabajar en nosotros, pues de nada vale gastar nuestro precioso tiempo presente en detestar a alguien o algo por un hecho al que, lamentablemente, ya no podremos cambiar. Aprender a soltar y gestionar nuestras emociones es lo más apropiado.
De nada vale desearle el mal y buscar venganza, las cuales son algunas de las maneras como se manifiesta el rencor usualmente. Por el contrario, a menos que hayamos sido víctimas de un hecho punible, buscar justicia quizás no resarcirá el daño que hemos sufrido, pero sí evitará que caigan otros.
¿Qué consecuencias emocionales tiene el no dejar de guardar rencor?
Cuando una persona no puede dejar de guardar rencor puede experimentar algunas de las siguientes consecuencias. Si bien no os juzgo por vuestras emociones, es bueno que tengáis en cuenta si verdaderamente vale la pena. Vuestra salud y bienestar deben ser siempre primordiales:
- Quien siente rencor y resentimiento no vive plenamente, pues ese sentimiento a menudo le hará sombra en su vida.
- Puede que eventualmente crea que todo el que se le acerca, es porque quiere hacerle daño.
- Por ende, los rencores les cohíben de construir relaciones sanas.
- Crean polarizaciones en sus relaciones. O están con ellos o en su contra.
- Se siente estresado y en constante tensión corporal.
- Sufren de alteración del sueño, por los pensamientos constantes acerca de lo ocurrido y la persona que les hizo daño.
Las 7 características de las personas rencorosas
Os he creado un pequeño listado con algunas de las características fundamentales de aquellos individuos que no pueden dejar de guardar rencor. Espero que si encontráis algunas de ellas en vuestra actitud, o si os reconocéis como una persona rencorosa, no dudéis en pedir ayuda profesional:
Son incapaces de ver las cosas desde otra óptica
El origen del rencor está fundamentado muchas veces en la incapacidad de las personas de mirar las cosas desde otra perspectiva. Esto no quiere decir que no existan situaciones en las que el sentimiento, sobre todo en situaciones de injusticia, en las que no sea válido lo que se siente.
Son radicales
Quienes no saben cómo dejar de guardar rencor suelen tener una visión radical de la vida, pues para ellos su opinión suele ser bastante marcada, y muchas veces no aceptan que alguien tenga una percepción distinta de la que ellos tienen de los hechos, razón que les hace sentir tanto resentimiento.
Piensan que ellos no se equivocan
En ciertos casos donde se guardan rencores por rencillas que realmente no tienen mayor importancia, y en vista de la radicalidad de sus opiniones, usualmente estas personas se obcecan en pensar que la opción que ellos plantearon era la única alternativa posible, y al no recibir apoyo, se enojan.
Son orgullosos
A veces hay que saber cuando el orgullo nos juega malas pasadas, ya que para dejar de guardar rencor es necesario reflexionar, a pesar de estar heridos. Suele pasar que quienes sienten algún reconcomio por otras personas, en parte les cuesta perdonar porque no les gusta dar su brazo a torcer.
Apagar los resentimientos para ser más feliz
Desean el control de todo
A veces las personas que sienten este tipo de sentimientos, no pueden dejar de guardar rencor porque les molesta que lo sucedido se haya salido de su propio control. Las personas no podemos manejar los factores externos, ni las reacciones ajenas, pero sí la manera en la que lo hacemos nosotros.
Se ofenden con facilidad
Para dejar de guardar rencor por todo lo que nos ocurre, debemos trabajar en nosotros y entender que el mundo no tiene nada en nuestra contra, sino que somos nosotros quienes todo nos lo tomamos a modo personal. Una posición mucho más abierta a la discrepancia de opinión, siempre será lo mejor.
Personalidad dramática
Es común encontrar que algunas personas con características de personalidad histriónica, también les cuesta dejar de guardar rencor, pues no pueden dejar de recrearse una y otra vez en el evento vivido, por lo que siempre están mentalmente en el mismo ciclo de sufrimiento.
Son desconfiados
Uno de los factores que debemos tener en cuenta para dejar de guardar rencor es la confianza. Todas las personas somos vulnerables a ser lastimados cuando construimos relaciones con otros. Aunque el otro tenga la posibilidad de hacerlo, no podemos vivir la vida en la angustia de pensar que lo harán.
7 pasos para dejar de guardar rencor por una persona
Si tienes serias dificultades para dejar de ser rencoroso (a), puedes empezar analizando los siguientes puntos que quiero compartir contigo. Por supuesto, recuerda que siempre contarás con la ayuda de los profesionales de la salud mental, quienes podemos ayudarte a trabajar en ti:
Admite que eres una persona rencorosa
La vía más fácil de comenzar cualquier proceso terapéutico es reconociendo que hay algo que nos está haciendo sufrir, que hay algo en nuestra vida que nos incomoda, y el primer paso para que ello ocurra es aprendiendo a verbalizar nuestras emociones por sus nombres.
Así que el primer paso para empezar a dejar de guardar rencor es ¡reconociendo lo que sientes! Si quieres saber más de ello, te aconsejo que revises el siguiente artículo que he escrito sobre dependencia emocional, donde dejo algunas recomendaciones sobre cómo actuar al respecto.
Respétate
Para dejar de guardar rencor, debemos entender que sentir tal reconcomio solo nos afecta a nosotros mismos. Todas las personas debemos aspirar a vivir una vida en bienestar, y eso quiere decir que nos debemos cuidado y amor propio, mas no derrochar pensamientos fútiles en quien no lo merece.
Extrae un aprendizaje del origen del rencor
¿Qué aprendizaje dejó tan desagradable experiencia? ¿Harías lo mismo a otra persona? Eso es lo verdaderamente rescatable de todo ello. Lo que haga quien nos hizo daño no está en nuestras manos, pero sí la manera en la que nos comportaremos a posteriori, la persona que nació de nosotros tras los hechos.
Mira los hechos desde otra perspectiva
Uno de los pasos más sencillos para dejar de guardar rencor consiste en salirnos del papel de víctima, y mirar los hechos desde otra óptica. Entender las razones por las que el otro, de manera consciente o inconsciente, nos hizo daño, si fue o no su verdadera intención, nos dará otra visión del tema.
Ten empatía
Por ti, sin que ello signifique que te mantengas en el eterno papel de la persona que ha sufrido el daño. Para dejar de guardar rencor debes aprender a perdonarte a ti también, por haber caído en tal situación. Acepta lo ocurrido, y sigue adelante. Es el mejor regalo que puedes darte, después de lo vivido.
Habla desde la asertividad
La psique humana está atravesada por el lenguaje, por tanto; es indispensable cuidar lo que decimos a los demás. Aprender a comunicarnos cuidando la emocionalidad del otro, nos permitirá construir relaciones más sanas, así como también, nos ayudará a mantener a raya a aquellos que no sepan hacerlo.
Trabaja en el desapego
Finalmente, aprender a dejar ir. El pasado ya se fue, y nada podrá cambiarlo. Quizás sea inevitable recordar, pero sí podemos trabajar en ayudar a nuestra mente a enfocarse a vivir el tiempo presente, que es lo único que verdaderamente tenemos. Si necesitas ayuda, el IEIE estará allí para ti.
Infografía sobre cómo dejar de guardar rencor
Recomendaciones sobre cómo dejar de guardar rencor y seguir adelante
Henry Ward Beecher, quien en vida fue congresista norteamericano, solía decir: «Puedo perdonar, pero no olvidar», es solo otro forma de decir, «No puedo, perdona», como referencia al hecho de que perdonar, no quiere decir que las personas estemos dispuestas a volver a una relación con el perdonado.
Hay quienes pueden volver a crear lazos, hay otros prefieren perdonar y pasar de ello. Es entendible. En cualquier caso, el perdón implica que esos pensamientos y esa persona ya no van a robar nuestra energía, no porque hayamos olvidado, sino porque hemos decidido enfocarnos en algo más.
Es entendible que en cada experiencia de vida, dejar de guardar rencor pueda ser un problema muy difícil de resolver. Sin embargo, para aquellos que quieren una segunda oportunidad para vivir en paz mental, la terapia en cualquiera de sus modalidades puede ser una muy buena ayuda.
Por ejemplo, en el Instituto Europeo de Inteligencias Eficientes hacemos que aquellos que están redescubriéndose a sí mismo y a sus emociones, vivan experiencias únicas, que les hagan replantearse su posición ante su propia historia de vida, para que puedan construir una más plena de cara al futuro.
Por ello, hemos creado nuestra Academia de Emociones La Experiencia, para ayudar a las personas a conocer sus propias reacciones ante los estímulos externos, y de esta manera adquieran las herramientas que necesitan para aprender a quitar la rabia, la ira y el rencor acumulado por años.
Regálate esta oportunidad para crecer y cambiar de perspectivas con respecto a esos temas de tu pasado que tanto te roban el sueño. Tú mereces la oportunidad de crear una vida plena y en bienestar, de vivir otras experiencias. Estamos aquí para ayudarte en ello. ¡Venga, anímate!
